Cada marzo, en la quebrada de Humahuaca y en toda la región andina se siente el espíritu del Carnaval, esta veneración a la Pachamama. Ya se preparan las comparsas, músicos, lugareños y turistas para el comienzo de esta fiesta del Norte Argentino que se vive entre bailes, chicha y coplas.
Todo Jujuy se prepara para recibir muchos turistas.
La ciudad de Humahuaca es uno de los puntos centrales de los festejos, donde se estiman que llegarán mas de 40.000 visitantes, casi el triple de la población local. Los hoteles de la quebrada están prácticamente completos para el fin de semana largo de marzo.
Marcado por el calendario agrícola y el sincretismo religioso, el carnaval es la principal celebración del año en la región, y el año no arranca hasta que concluye la fiesta.
Los días de diversión anteceden al ayuno y al decoro que marca la tradición católica para la cuaresma. El inicio más esperado es el desentierro del diablo.
Parte de los festejos, es venerar a la madre tierra (Pachamama), ofreciendole bebidas alcohólicas, cigarrillos, ornamentos y comidas especialmente preparadas, luego los miembros de las comparsas quebraderas desentierran el diablo del mojón (montículos de piedras).
En algunos lugares como Tilcara, un muñeco simboliza al diablo que trae alegría para todos sin excepción. Pero ese diablo no es el de la concepción católica, no es el mal absoluto, sino que es ambivalente. Trae la alegría, pero le piden que no los lleve.
En muchos lugares, se mantiene la costumbre de hacer chicha (bebida alcohólica a base de maíz) y cantar coplas, acompañadas por instrumentos autóctonos.
También persiste el rito de la marcar o señalar los chivitos y cabritos que nacieron ese año.