A traves de una red de comunidades indígenas se puede conocer la Puna de una manera completamente nueva, donde le propone a los visitantes hilar lana de llama y tejer con telar, seguir los senderos de los arrieros hasta llegar a Chile, aprender a hacer queso casero y otras artesanías y muchas mas actividades.
Esta modalidad de turismo rural, tiene como base el desarrollo económico y social de diferentes comunidades olvidadas en toda la Argentina, especialmente en el Norte de nuestro pais.
En la Argentina hay muchas localidades y pueblos pequeños que ven con tristeza como los jovenes emigran a lugares con mas alternativas, pero muchos de estos jovenes están regresando a sus comunidades donde pueden aprovechar las bondades que el turismo ofrece.
En la Puna Jujeña existe el corredor turístico Espejos de Sal integrado por comunidades aborígenes.
Este circuito agrupa a 32 familias que trabajan en una red cooperativa en el territorio de las Salinas Grandes, de los localidades: Rinconadillas, San Francisco de Alfarcito, Santa Ana, Cerro Negro, Sauzalitos, Barrancas y Susques. Todas estas localidades están a 3.600 metros sobre el nivel del mar.
El viajero experimenta la vida de los puneños, en especial, la vida de las comunidades aborígenes desde que se asentaron sus ancestros hace mas de 10.000 años hasta la actualidad.
Estas comunidades se capacitaron para aprender a atender a los visitantes, que llegan en busca de descubrir sus casas, sus costumbres y el maravilloso entorno natural en que viven.
Los paquetes turisticos son armados y comercializados por las comunidades indígenas, las excursiones incluyen guías nativos.
Entre las actividades más destacadas están el pastoreo de llamas, el manejo del ganado, el trabajo de siembra y cosecha, la preparación de la lana y el tejido en telar.
También se aprende a cocinar la cocina tradicional.
Turismo Rural de Base Comunitaria es:
- Responsable respecto al uso y manejo de los atractivos y recursos de la región donde se desarrolla.
- Respetuoso de los modos de producción y de la forma de vida de las comunidades involucradas.
- Honesto, tanto en la forma de elaborar y presentar el producto, procurando que el mismo conserve sus condiciones de autenticidad, como en la forma de ofrecerlo al consumidor o turista, de manera que éste tenga una imagen absolutamente real de lo que adquiere o consume.
- Interactivo ya que produce experiencias vivenciales, de contacto y de participación.
- Democrático pues debe generar amplios procesos de participación para la toma de todo tipo de decisiones, sin perder de vista el objetivo que la comunidad se ha fijado en cada caso.
- Equitativo porque los beneficios que genera deben distribuirse en forma justa y adecuada a las circunstancias, teniendo en cuenta que el objetivo final es el incremento de la calidad de vida de la comunidad visitada y una mejor distribución de los ingresos de la misma.
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